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por Carlos Belgrano Amigos: Si nos trasladamos a la actualidad, veremos sin esfuerzo, que la desocupación es del 30% y la deuda exterior es de más de doscientos mil millones de dólares. Quintuplicamos esos añejos guarismos en menos de treinta años. Una proporción casi idéntica, se registra con el incesante crecimiento de la inseguridad jurídica y también callejera. Siempre sostuve que la gestión del Gobierno del Proceso, no fue buena. Que la guerra institucionalizada contra las hordas terroristas, se clandestinizó sin necesidad alguna. La aventura de Malvinas, como telón de fondo de esa gestión de gobierno hizo, desafortunadamente el resto, como para recordar a los hombres de las Fuerzas Armadas, como abrumados por la impericia. Y no he de retractarme sobre mis dichos. Pero si aplicamos una dósis no excesiva de revisionismo, veremos que quienes defienden este carcinoma gobernante y las alternativas de las filas opositoras, son aquéllos que han disfrutado de las bondades de esta fraternidad para el saqueo como María Elena Walsh, quien hoy ha partido, gustaba de clasificar a toda esta cuestión merdosa y maloliente de la democracia. Tres décadas han transcurrido, desde que el órden y la disciplina desaparecieron en una sóla noche. Para ser reemplazados por estos radicales, que como antes de ahora señalé, no tienen idea de lo que la administración del Poder implica en los destinos de una Nación. Quienes fueron sucedidos por Menem, que a todas luces, como dicen los españoles, fue y es la ignorancia en el concepto. Pero ello está circunscripto a lo cultural, a lo intelectual, ya que en lo gubernamental, tuvo una acabada idea de como destruir las bases históricas, con las que nos manejamos inveteradamente durante muchos años. El "Turco" le puso precio a todo; a la amistad, a la oposición, a los enemigos, a los cómplices, y por desgracia a muchos Militares a quienes les enseñó el inédito concepto del desenfado. Martin Balza fue su egresado modelo. Infortunadamente el primero, no el único. Destruyó con una sonrisa el complejo industrial-castrense. Sacó provecho de la muerte de un soldado conscripto para suprimir el Servicio Militar y granjearse los votos de los chicos, que sufragaban por primera vez. Todo lo que luego hicieron Duhalde & Kirchner, fueron meros ejercicios, dentro de una matríz menemista, que tiene ganado su derecho de autor. Néstor que era un aprendíz de boludo, cuando Menem ya era archimillonario, tuvo la suficiente inteligencia para tan sólo seguir los pasos de su tutor. "El Cabezón" que le vendió la presidencia al tuerto, también tomó de Menem, lo único que no había aprendido convenientemente: El Cinismo. Por eso, cuando escuchen acerca de la guerra sucia, del avasallamiento de las libertades individuales y de cualquier imputación de la que puedan ser objeto nuestros Hombres de Armas, recuérdenles a los descerebrados que pontifiquen sobre esos ítems, que en 1983 teníamos: DESOCUPACION 6% - DEUDA EXTERNA u$s 30.000 MILLONES.
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