ENTREVISTA: LA PELEA DE UNA MUJER ACAMPADA A LAS PUERTAS DEL RANCHO DEL PRESIDENTE BUSH

"Mi hijo murió en Irak por una mentira, y quien lo mató fue George Bush"

Cindy Sheehan es la madre de un marine acribillado en Irak el año pasado. Pero también es un fenómeno mediático que disparó un duro movimiento antiguerra.

"Mi hijo murió por una
mentira. Y, si no es así, yo quiero que Bush me explique cuál es la causa tan noble por la que murió mi hijo. ¿Qué amenaza representaba Irak para Estados Unidos?" Cindy Sheehan lo dice con rabia y también con mucho dolor. Su hijo, Casey Sheehan, 24 años murió el 4 de abril de 2004 en Irak.

"A mi hijo
lo mató George Bush", dijo a Clarín durante una entrevista en la que se le escapó más de una lágrima. "Bush no es el liberador de Irak. Los liberadores se van, sólo los invasores se quedan".

Alta, ojos celestes, rubia, vestida con un short beige, remera blanca y zapatillas de tenis, Cindy es la típica madre californiana que uno imagina llevando a sus hijos a la práctica de fútbol. Sin embargo se ha convertido en un ícono de la resistencia contra la guerra y un inquietante fenómeno político y mediático. The New York Times ha dedicado páginas para contar la historia de esta mujer, que es tapa de los principales medios de Texas. Es la cara del movimiento antibélico, casi un émulo de aquel que se disparó durante la guerra de Vietnam. Hace una semana, Cindy decidió acampar a las puertas del rancho de Bush, donde está de vacaciones en Texas. El golpe en los medios fue enorme.

"No me moveré de aquí hasta que Bush no me reciba", dice a Clarín. "Nos debe a todos una explicación y si la
prensa no hizo su trabajo será una madre de California la que deba hacerlo"

Con sondeos indicando que más de 62% de la gente rechaza la manera que Bush conduce la guerra, la determinación de Cindy atrajo a cientos de personas que se instalaron junto a la carpa que colocó a orillas del camino que va al rancho de Bush. Esto politizó enormemente la situación.

Así como los grupos de derecha intentan demoler a Cindy con campañas en internet, una serie de organizaciones demócratas comenzaron a apoyarla. True Mayority, un grupo antiguerra, contrató a la firma especializada Fenton Comunications para que coordine las entrevistas con los periodistas norteamericanos que hacen cola frente a su carpa para entrevistarla.

"Usted es el primer medio extranjero que viene a visitarnos, le confieso que nunca me imaginé que iba a generar esto", dijo Cindy al diario Clarín de Argentina.

—¿Cómo se le ocurrió esta idea?

—Bush dijo que los marines caídos en Irak murieron por una
causa noble y que para honrar los sacrificios de los muertos es necesario seguir adelante con la misión en Irak. Eso me enfureció. No quiero que Bush siga utilizando la muerte de mi hijo para justificar la permanencia de las tropas allí.

—Bush dijo que comprende su dolor, pero no comparte sus opiniones.

—¿Si se trata de una causa tan buena por qué
no envía a sus dos hijas gemelas a Irak a reemplazar a uno de los tantos soldados que ya van por la tercera ronda de servicios allí? Esta guerra se basó en mentiras y decepción. Ni una gota de sangre tendría que haber sido derramada por esta guerra. Las tropas tienen que regresar ya.

—Aquí no hay servicio militar, su hijo eligió ser militar y el era consciente de que podía morir en una guerra.

—No se confunda, nosotros apoyamos a nuestras tropas. Ellos aman al país y quieren servir a nuestro país. Pero
ser usados tan arrogantemente por gente que no tuvo el coraje de servir al país en su momento (Bush) y que no tiene honor, es otra cosa. Deshonran la memoria de nuestros hijos continuando la matanza.

—Bush ya la recibió una vez.

—Sí, pero aquello fue como un party. Ni siquiera él sabía el nombre de mi hijo.

—¿No hizo comentarios elogiosos luego de esa reunión?.

—En aquel momento no teníamos la información que tenemos ahora. Y además lo que dije fue sacado fuera de contexto.

—¿Es verdad que su familia está dividida por esto?

—Me separé de mi marido por la guerra. Ambos somos demócratas y los dos estamos de acuerdo con que las tropas deben regresar a casa. La diferencia es cuán pronto. Tampoco estaba de acuerdo con la intensidad de mi actividad. Quería que hiciera menos, pero yo no pude. Hicimos el duelo de una manera totalmente diferente. Fue muy doloroso.

Cindy Sheehan