HA
GANADO LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN
por
Luis P. Erraiz
Ha
ganado la libertad de expresión. Después de años de lucha, de
inadmisiones a trámite y jugarretas jurídicas, se ha conseguido que el
Tribunal Constitucional declare inconstitucional el artículo 607.2 del Código
Penal (aquel "Código Penal de la democracia" de que hablaba
Juan Alberto Belloch), que decía que «la difusión por cualquier medio
de ideas o doctrinas que nieguen o justifiquen los delitos tipificados en
el apartado anterior de este artículo [delitos de genocidio], o pretendan
la rehabilitación de regímenes o instituciones que amparen prácticas
generadoras de los mismos, se castigará con la pena de prisión de uno a
dos años».
Este artículo, en completo conflicto con el derecho fundamental
garantizado por la Constitución de 1978 de la libertad ideológica -y de
la libertad de expresión-, ha amparado persecuciones y encarcelamientos
de historiadores en búsqueda de la verdad.
Desde aquí, quiero felicitar a Pedro Varela por la valentía al
interponer ese recurso de apelación ante la condena que, en noviembre de
1998, se le impuso por distribuir y vender libros, carteles y vídeos «en
los que de forma reiterada e inequívocamente vejatoria para el grupo
social integrado por la comunidad judía se negaba la persecución y el
genocidio sufridos por dicho pueblo».
Exigir coherencia al Ordenamiento Jurídico de un Sistema con el que no
estamos de acuerdo es otra forma de luchar. No podrán cohartar la
libertad de expresión de quienes combaten la imposición de una Historia
falseada.
Ha conseguido más esta sentencia que mil leyes de memoria histórica.
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