EL PODER EN EL PERÚ

por Tankar Rau-Rau Amaru

tankar2@hotmail.com

 

1) EL PODER ECONÓMICO.- ¿Quiénes tienen el control de la economía de nuestro país? En la mayoría de los casos son otros, nosotros no. En el Perú, ningún banco y ninguna gran industria está en manos de los kechwa-aymaras (entiéndase esto como descendientes de los inkas, chankas, etc, los verdaderos dueños de esta casa que se llama Perú). Pocos son los kechwa-aymaras que han podido posicionarse bien en el país porque la exclusión es sistemática. Las leyes privilegian a las empresas grandes y extranjeras (en algunos casos ni pagan impuestos) pero castigan con impuestos antitécnicos a nuestras microempresas y medianas empresas.

2) EL PODER POLITICO.- El poder político protege al poder económico. ¿Quiénes se encuentran detrás de los partidos políticos de Lima? Veamos lo que ha sucedido en los últimos años. Detrás de Alejandro Toledo se encontraba como vicepresidente el israelí David Waisman (miembro de la Comunidad Judía). Detrás de Alan García está Giampietri como primer vicepresidente, ligado a los Brescia (italianos), uno de los dueños del mar peruano. Detrás de Lourdes Flores estuvo como primer vicepresidente Arturo Woodman, ligado a los intereses de la Comunidad Judía y la derecha chilena. Detrás de Ollanta como asesor principal se encontraba Lerner Ghitis, y el número uno en su lista de candidatos al Congreso se encontraba Isaac Mekler, ex presidente de la Comunidad Judía. Esto significa que los israelíes (y no sólo ellos) siempre han manejado el país para sus propios intereses, sea quien sea el presidente (militar o civil, de izquierda o de derecha). ¿Había algún kechwa-aymara como candidato a la vicepresidencia? No. ¿Cuántos congresistas kechwa-aymaras hay en la actualidad? Pocos; en la mayoría de los casos son figuras decorativas porque no les dejan tomar decisiones.

3) EL PODER DE LAS ARMAS.- El poder que protege a los otros poderes (1 y 2) es el de las armas. ¿Hay kechwa-aymaras generales o almirantes? No. Hay castas de pequeños grupos oligárquicos que controlan nuestras fuerzas armadas y la policía. A nosotros nos utilizan para ser suboficiales, cabos o sargentos (o reservistas) , pero nos limitan si nosotros queremos ser oficiales. Para eso han elaborado sus leyes. Sólo los que tienen padrinos y dinero pueden ingresar a las escuelas de oficiales. Y como nosotros no tenemos padrinos, tampoco dinero, las puertas ya están cerradas. Si unos cuantos de nosotros logran ingresar a la escuela de oficiales, no les dejan avanzar (con las justas les dejan llegar hasta capitancitos o coroneles, aunque sean muy buenos soldados o policías), o les ganan para que defiendan sus intereses. Esto trae la desventaja de que en estos momentos, si hay paros o huelgas, los generales de “ellos” ordenan a “nuestros” policías y soldados a disparar contra NOSOTROS.

4) EL PODER DE LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN. - Los dueños de los grandes medios de comunicación de Lima (periódicos, canales de televisión, radios) son, en su mayoría, ligados a empresas extranjeras o a la oligarquía local. Por eso se encuentran al servicio de los intereses de particulares y no del país, menos de los kechwa-aymaras. Son el respaldo de los poderes político, militar, económico.

El contrato social o carta magna que blinda todos estos poderes es la Constitución de 1993, la de Fujimori. Esta Constitución dice que “la defensa de la persona humana y el respeto de su dignidad son el fin supremo de la sociedad y del Estado”. Pero la realidad es otra. Mejor debería decir: “La defensa del capital (extranjero) es el fin supremo de la sociedad y del Estado, y pobre del que se oponga a esto”.