DE PIE EN MEDIO DE LAS RUINAS

por Ing. Fernando M. Fluguerto Martí

 

Esa es la consigna a seguir por los Caballeros y las Damas que aún quedan en el mundo. Porque en este mundo en crisis terminal, previa a la explosión material, anímica y espiritual que asolará parte de la humanidad en corto tiempo, mantenerse en pie , "contra viento y marea, contra el humo y el ruido ensordecedor", es hoy más heróico que en la Edad Media ganar una batalla o tomar por asalto un castillo fortificado.

Y "mantenerse en pie" implica permanecer con la cabeza, el corazón y la mirada lúcidos y serenos, contra los influjos malignos que nos sugieren justamente todo lo contrario y pretenden llevarnos a la desesperación y la confusión.

La realidad que percibimos con nuestros sentidos y la realidad que nos imponen los medios de difusión intentan mostrarnos una situación trágica y enloquecedora. El caos generalizado y la confusión de nuestros pensamientos es el objetivo que se han fijado los "formadores de opinión" para que nadie actúe de acuerdo a los principios tradicionales que siempre deben guiar nuestros actos. Que la parálisis del terror se imponga por sobre el pensar y actuar serenos y firmes. Que todo parezca estar fuera de control y por sobre todo fuera de nuestro control.

Pero los auténticos Caballeros y Damas, con sus pies bien afirmados en la tierra y sus espíritus dirigidos hacia y por el Cielo, mantendrán viva la llama del Espíritu en sus corazones y no dejarán que se apague con los soplos de ningún viento huracanado ni con las olas amargas y salobres de ninguna tsunami vivencial.

Con la Luz y la Fuerza de Nuestro Señor y de su dulce Madre todo nos será posible. Aún lo que nos parece imposible.