LA PERSECUCIÓN QUE VIENE

por Alexis López Tapia

 

A propósito recientes rayados y amenazas a la comunidad Judía –hechos que nosotros repudiamos y condenamos totalmente-, un grupo de parlamentarios ha decidido impulsar la llamada “Ley contra delitos de Odio”, que buscaría castigar con penas de presidio a quienes “inciten al odio” contra denominaciones religiosas, grupos raciales y otros.

A priori, una legislación de tal naturaleza parece proteger a dichos grupos de quienes, de manera deleznable, cometen actos en su contra.

Sin embargo, nos llama profundamente la atención que en las declaraciones de los parlamentarios, el Senador Girardi  haya señalado que “el año pasado presenté un requerimiento al Tribunal Constitucional para declarar inconstitucionales” a los grupos neonazis, pero “lamentablemente” a principios de 2010 esa corte lo rechazó.

Llama la atención, porque en realidad, el único Movimiento que efectivamente fue requerido por el Tribunal para contestar de las acusaciones fue Patria Nueva Sociedad, quedando establecido por el más alto Tribunal de la República que el nuestro es un Movimiento Político, Público y Legal, y que –adicionalmente-, siempre se ha manifestado en contra de la Violencia contra cualquier persona o grupo, que no profesa ideas racistas, que ninguno de sus integrantes participado en hechos de violencia, que está en contra del antisemitismo, y que, en general, nada tiene que ver con quienes así actúan.

Por eso, la llamada “Ley contra delitos de Odio” en realidad debería comenzar a llamarse desde ya “Ley anti PNS”, ya que lo único que queda meridianamente claro de las declaraciones de los parlamentarios, es que esta Ley busca impedir que nuestro pequeño Movimiento pueda Inscribirse como Partido Político para participar de pleno derecho dentro del sistema democrático que existe en nuestro país.

A ello se debe sumar la declaración de ciertos sectores Sionistas, que han señalado estar estudiando una querella internacional contra nuestro Movimiento, precisamente por haber ganado el requerimiento en el Tribunal Constitucional.

¿Es tan débil la Democracia en Chile que –ante la mera posibilidad de que nuestro Movimiento llegue a Inscribirse como Partido Político-, se deban buscar estrategias jurídicas para impedirlo?

¿Son tan tontos los chilenos que serían capaces de dar su Firma para que en Chile exista un Partido violento, racista, antijudío, xenófobo y básicamente maligno, o es que en realidad eso es lo ciertos grupos quieren que los chilenos piensen de dicho Partido?

¿Es necesario mentirle a todos los chilenos señalando que “ningún país civilizado puede aceptar que los nazis se organicen y difundan libremente sus ideas, que permanentemente incitan al odio, la descalificación racial y la exterminación religiosa” -como señaló Girardi-, desconociendo el hecho evidente de que Patria Nueva Sociedad NUNCA se ha definido como “Nazi”, “Neonazi” ni menos “Skinhead”, y que -precisamente por ello- quienes así se autodefinen nos consideran “traidores”, “infiltrados”, “pagados por Israel”, y una larga sarta de estupideces más?

En síntesis ¿qué es lo que realmente busca esta Ley?

La verdad es que esta “Ley anti PNS” pretende simplemente que se nos condene NO POR LO QUE SOSTENEMOS, sino por lo que estos parlamentarios DICEN QUE SOSTENEMOS.

Se trata lisa y llanamente de una persecución ideológica de carácter totalitario y antidemocrático contra nuestro Movimiento.

Así que desde aquí les digo a nuestros 7 militantes, a nuestros 680 estudiantes, y a nuestros miles de simpatizantes a lo largo del país:

¡Muchachos!, la contienda es desigual.

Nunca antes en Chile –en Democracia-, se había intentado con tanta virulencia y falsedad prohibir una forma de pensar.

Nunca antes en Chile, la Izquierda y la Derecha –unidas como siempre, porque son lo mismo-, habían intentado condenar y exterminar a quienes pensamos que son ellos los que le hacen mal a Chile; que son ellos los que durante toda nuestra Historia han sometido al Pueblo a sus dictados y a los intereses de sus Amos; que son ellos los que jamás permitirán un Chile verdaderamente Libre, Soberano e Independiente; que son ellos los que quieren un pueblo ignorante, porque sólo la Cultura nos hace libres y eso es enemigo de sus intereses.

Nunca antes, en toda nuestra Historia, se había tratado de proscribir el pensamiento como está ocurriendo precisamente ahora con nosotros.

Y a los tontos útiles que están alegres por todo esto, quisiera simplemente parafrasear lo que dijo hace mucho tiempo el pastor protestante Martin Niemoeller (1892-1984):

"Primero vinieron a buscar a los militares, y yo no hablé porque no era militar.

Después vinieron por los anarquistas y los nacionalistas, y yo no hablé porque no era lo uno ni lo otro.

Después vinieron por los de Patria Nueva Sociedad, y yo no hablé porque no era de PNS.

Después vinieron por mí, y para ese momento ya no quedaba nadie que pudiera hablar por mí".